Amigo, tú que afianzas mis creencias o las arrastras hacia las dudas, tú que aumentas mis conocimientos y mis metas, tú que criticas mis objetivos y creas de nuevos, tú que alimentas mi ilusión y me cambias de camino, tú que permites mi comunicación, la de los mudos, sordos, ciegos y necesitados de saber, tú que hablas tantos idiomas llegando a tantos corazones y mentes haciéndolas libres…
Para ti amigo, te dedico mi idea, mi obra, te devuelvo parte de ti, ahora amigo, ahora que se nos sumerge en un mundo virtual, volátil y quizás fugaz, ahora muestro tu historia, tus hogares perennes, aunque tus hojas llenas de valor invisible, pero palpable, parece que vayan a ser… caducas.