Mediante esta obra reflexiva, nuestro consciente recupera una escena de problemática social utilizada a capricho.
Mediante esta pieza, se usa el arte para conmover conciencias individuales y colectivas, despertando, encendiendo la luz, enfocando y señalando la crudeza del ser humano. A su vez, creando y reforzando vínculos emocionales, afectos comunes que nos unen.